- El número de Mb de RAM para que funcione razonablemente más rápido.
- El número de disquetes necesarios para instalarlo.
- El porcentaje de compradores que han tenido que actualizar el equipo tras comprar Windows 98.
- El número de Mb requeridos por el disco duro.
- El número de páginas de la sección de Instalación Fácil del manual.
- El tiempo en minutos que tarda en cargarse.
- Las llamadas efectuadas por cada usuario al servicio técnico de Microsoft.
- El número de Mhz, para que por lo menos pueda arrancar.
- El intervalo de segundos que tarda Windows 98 en colgarse.
JEJEJEJEJE.
1 comentario:
Snifff.... a pesar de todo lo extrañamos jaja. Por lo menos, fue un fiel compañero hasta la llegada del XP.
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